Han sido 15 días que me hacen regresar con una maleta llena de buenos recuerdos, decenas de abrazos, cientos de besos, un montón de mimos, alguna lágrima y algo de ropa nueva. 15 días cargados de risas y de bailes, de cervezas Mahou, de electrónica, rock, salsa y pachangueo. 15 días que se convirtieron en 16 cuando yo perdí mi vuelo... tenía tantas ganas de pasar más tiempo en Madrid que ni me di cuenta. Han sido 15 días de viajes, baños, tomar el sol, salir a comer y cenar, acostarme tarde, dormir bien y despertarme cada día entre besos y cariños. Días de fútbol, de paella, de Vistillas, de cine.
15 días de encuentros y re-encuentros, días para compartir, para soñar, para pasarlo bien y disfrutar. Días en los que el ordenador permanecía apagado y solo se escuchaba el teclear en el What's Up para hacer el plan siguiente.

Han sido días de regalos, fotos y recuerdos, pero lo más importante es que han sido días para volver a recuperar las energías y el ánimo perdidos y regresar para esperar que pasen los meses y vuelva a tener este encuentro tan maravilloso con mi gente. Cuando vuelva a Madrid ya no habrá 40º sino 10º, ya no iré con camiseta de tirantes sino con abrigo, ya no tomaré gazpacho sino que me comeré un buen cocido. Llegaré para el sorteo de Navidad, las cenas familiares, la nochevieja, los regalos de Reyes y lo mejor de todo es que sé que volverá a ser increíble.
GRACIAS A TOD@S L@S QUE EN ESTOS 15 DÍAS HABÉIS ESTADO TAN CERCA Y ME HABÉIS HECHO SENTIR EN CASA